Cuando las relaciones de pareja resultan duraderas y los lazos se afianzan, es normal que los dos opten por querer vivir juntos: sienten que están listos para comenzar una nueva etapa donde compartirán nuevas experiencias y aprenderán más cosas en compañía del otro.
Sin embargo, no siempre somos conscientes de las dificultades que se nos pueden presentar en un futuro cercano de convivencia en pareja: nos dejamos fascinar por la frase que dice «todo lo que necesitas es amor», pero descuidamos los aspectos básicos de la interacción cotidiana con otra persona.
También puede pasar que en plena etapa de amor romántico se nos ocurra la idea, disparatada en la mayoría de los casos, de irnos a vivir con nuestra pareja sin pensar mucho en las implicaciones de esta decisión; por ende, terminamos descubriendo, a través de la experiencia, que aún no estábamos listos para este cambio o, peor aún, que el amor se deterioró gracias a las dificultades que trajo la convivencia precoz.
Con esto no quiero decir que si lo haces justo en esa etapa de enamoramiento todo saldrá mal y será un eminente fracaso, también existen posibilidades de que te vaya bien, pero el riesgo de hacer la experiencia traumática resulta más alto; por eso, lo mejor es darse a la tarea de preparación y autoreflexión para saber si, verdaderamente, estamos listos para emprender esta etapa de madurez y una buena relación de pareja.
Soy Francisco Martins, coach, autor y especialista en relaciones de la Academia del Amor, y hoy te revelaré las señales con las cuales sabrás si están listos para vivir juntos como una de las mejores estrategias para emprender en pareja.
Para que sea más provecho la información, he decidido dividirla en dos partes para que puedas identificar, más claramente, la importancia de autoevaluarse como pareja antes de concretar esa decisión de vivir juntos.
Primero, se encuentran los factores externos a ustedes, cosas que no dependen de su deseo de prosperar juntos sino de lo propicio que sea el entorno para tomar esa decisión y, luego, te compartiré los factores internos, cosas que dependen enteramente de su deseo de convivir exitosamente y en los que vale más el es fuerzo.
Señales externas para saber si están listos para vivir juntos
Estas señales hacen referencia a las condiciones externas a nosotros que ayudan a determinar qué tan preparados estamos para asumir la responsabilidad. Una cosa es que cada uno se sienta listo para asumir el reto de vivir juntos, y otra muy diferente es que el entorno sea el propicio para que se dé con éxito.
A veces, nos aventuramos a hacer las cosas por un deseo muy fuerte de alcanzar lo que buscamos, pero también debemos tener criterio para decidir si es el momento propicio para hacerlo; en ocasiones, hay otras prioridades más allá del deseo, como la familia, la salud, la economía o la calidad de vida de cada uno.
Para tomar grandes decisiones como vivir juntos hay que hacerlo con criterio Share on XTómense su tiempo para valorar en qué situación se encuentran sus vidas en este momento, así sabrán si es el momento óptimo para vivir juntos, o si costará mayor esfuerzo: tendrán claro a qué atenerse y cómo planificar el cambio de situación.
Ya han vivido de forma independiente
Este punto aporta mucho para hacerse responsable de sus propias tareas.
No es totalmente necesario que cada uno haya vivido independientemente, pero sí es necesario que tengan un sentido de la responsabilidad que solo puede aportar el hacerse cargo de sí mismo. Entre adultos, nadie debe recargar sus deberes en otra persona.
Tienen todo lo material necesario para vivir juntos
A veces cuando se toma la decisión de independizarse, esto trae consigo la necesidad de adquirir algunas cosas de casa que no poseemos, si bien puedes encontrar lugares equipados con todo, también hay casos donde debes completar esos utensilios o muebles esenciales del hogar; por tanto, es conveniente tomarse el tiempo para adquirir esas cosas faltantes para no dejar este cabo suelto.
Están económicamente estables
Para ser claro te diré lo siguiente: básicamente no solo se vive de amor, esto solo es una metáfora mal formulada porque, por más que amemos, el amor no nos proveerá de todo lo que necesitamos para sobrevivir; la realidad es que al ser individuos parte de esta sociedad, debemos contribuir en las dinámicas económicas para generar los ingresos que necesitamos.
Si logramos esa estabilidad económica, ya estaríamos dando un paso trascendental para vivir y emprender en pareja.
No tienen problemas con la familia del otro
Es primordial tener en cuenta que tú no estás en una relación amorosa con la familia de tu pareja, sino con tu pareja como tal. Ya dicho esto, te quiero decir que la familia de tu pareja es el núcleo emocional primario que sintió amor y aprecio por él antes que nadie; en este aspecto, lo mejor es que no compitas por el cariño con estas personas.
Tu pareja puede ser consciente de que su familia tiene actitudes tóxicas, o bien puede no saberlo: si puedes llevarte bien con ellos, es una ventaja para ti y para su convivencia futura; si no pueden llevarse bien, basta con que evites los conflictos.
Tu pareja te quiere a ti, y también quiere a su familia; esfuérzate por llevar un trato amable con ellos, apóyalo cuando las situaciones familiares sean complicadas y dale espacio para compartir con ellos como es debido.
Todos tenemos una familia que amamos; piensa en el amor que tienes por tu propia familia para entender la libertad que tu pareja desearía para compartir con sus seres queridos; ahora, si te llevas bien con ellos, matas dos pájaros de un solo tiro: comparten y disfrutan tanto su familia como ustedes en pareja.
Cuestiones internas a tomar en cuenta antes de irse a vivir juntos
Estas cuestiones hacen referencia a las condiciones internas; es decir, las que dependen de nosotros mismos y de la pareja, las cuales ayudan a determinar nuestra preparación para emprender esta nueva experiencia.
Aquí sí juega el deseo y la motivación de hacer que las cosas funcionen; en esta sección, se encuentran los acuerdos que, como pareja, les pueden ayudar a asegurar su éxito en la convivencia. Son señales de sus compatibilidades, deseos y metas.
Si ya se te hacen familiares dichas señales, es muy probable que tengan las cosas a su favor al interior de la relación; pero, si no se ajustan a los hábitos que ya tienen, no te preocupes, dependen de ustedes mismos y pueden poner de su parte para alcanzarlos.
Cooperan en las labores de casa
Es complicado cuando las tareas del hogar se recargan en una sola persona, nunca subestimes la importancia de las labores domésticas. Si ambos cumplen con funciones equitativas en el hogar, muchas de las discusiones cotidianas se pueden evitar.
Es cuestión de iniciativa: si ambos aman que su hogar sea un lugar limpio y hermoso, les gusta comer cosas ricas y que la ropa siempre huela bien, entonces es lógico que los dos aporten para lograr ese fin.
Ya se conocen los defectos y no les molesta
Todas las personas tenemos defectos y aunque intentemos ocultarlos, siempre salen a flote en algún punto. No debes temer mostrar algunos de tus defectos, si se tienen la confianza suficiente, podrán superar las incomodidades que estos pueden generar.
En algunos momentos, uno puede ayudar al otro a superar las inconformidades; en otros casos, puede que sean insignificantes para tu pareja y no le molesten. Recuerden que son un equipo, no enemigos.
Se respetan como iguales
En este caso, es importante aclarar que el respeto es indispensable en toda ocasión y no solo como pareja. El punto específico aquí es entender que ambos estarán juntos como igual, no importa si uno de los dos, por ejemplo, tiene más ingresos que el otro; no se trata de una sociedad en la que cada uno posee acciones, ¡no!, es una unión donde hay apoyo mutuo sin reproches o un dominador.
Saben resolver sus conflictos
Como pareja deben evaluar si tienen la suficiente capacidad y madurez para enfrentar y resolver los conflictos que surjan dentro y fuera de la relación; si nos ahogamos en un vaso de agua cada vez que surge algún problema, tal vez sea demasiado pronto para asumir el reto de la convivencia juntos.
Sería mejor y más adecuado responder primero a estas falencias porque, si las llevamos con nosotros a la nueva casa, serán, sin lugar a dudas, un motivo de discordia haciendo que nos hastiemos rápidamente de esta experiencia.
Tienen estilos de vida similares
No deben ser estrictamente parecidos en los gustos o prácticas diarias, solo basta con tener afinidad entre sí, que se acepten y convivan tanto con sus diferencias como con sus similitudes; de igual manera, pueden sacar ventaja de ello y compartir juntos.
Por ejemplo, puede ser muy provechoso si alguno practica algún deporte, porque así podría invitar al otro a hacer caminatas, ir al gimnasio o simplemente empezar con rutinas saludables; también puede ser que practiquen juntos la meditación o disfruten de maratones de películas fortaleciendo así los momentos juntos, no solo por fuera sino en casa.
Tienen proyecto de vida juntos
Otra señal que indica si están o no listos para irse a vivir juntos es la construcción de un proyecto de vida que los involucre a ambos; no se trata solo de estar juntos sino de crear un propósito por el cual los dos se esfuercen. Solo así podrán impulsar todos esos sueños juntos sin dejar que los obstáculos les impidan cumplirlos.
Si aún no tienen definido este punto, es muy conveniente empezar a erigirlo; de otra manera, la solidez de la unión se verá afectada, pues ni siquiera saben por qué están juntos.
Un gran ejemplo es crear tu misión personal y luego compartirla con tu pareja para ver qué tan alineados están en sus deseos personales, en este post de Gabriela & Yeyo tienes un gran ejemplo.
Ya han hablado de compromiso
El tema del compromiso es crucial en una relación; es necesario abordarlo y tomar decisiones para ofrecerse fidelidad y cooperación mutua.
Si aún no lo han hecho, o no sabes cómo hablar de compromiso con tu pareja, te diré que solo es cuestión de confianza entre ambos: no es necesario ser muy drásticos, solo dejar las cosas claras y hablar con amor de lo que desean alcanzar en un futuro juntos.
Como te dije al principio de esta sección, las señales internas dependen de ustedes mismos: ustedes pueden actuar y hacer algo al respecto para mejorar el panorama interno de su relación y alistarse para vivir juntos en el futuro.
Ahora que te he revelado las señales que te ayudarán a descubrir si están listos para vivir juntos, no dudes en compartirlas con tu pareja para así iniciar el plan de vida juntos y evaluar si están preparados para enfrentar este maravilloso reto.
WILSON AMAYA dice
Excelente blog, me servirá un montón!
Mariana dice
Hola Fransisco. Hace más de dos años que salgo con una persona. Pero la que dice de vivir juntos soy yo a él no le interesa le gusta como esta y parece que quiere seguir así. Ya somos grandes y cada uno tiene sus hijos. Él nunca me da una respuesta acorde de por qué no quiere formalizar. Dice que me quiere y yo a él. ¿Que lo detiene?. Ya no sigo con el yo he tomado una decisión en dejarlo aunque duela. Solo quería saber si tu me puedes decir. Gracias
Janexis dice
Hola Mariana no tengo mucha experiencia en este tema pero pienso q el no quiere asumir responsabilidades y así es muy duro planificar un futuro en pareja
elemna dice
hola
me llamo Elena tengo 15 anos y tengo una relation con mi novio desde los 13 se que es una Carta edad ,emos a ablado ,de vivir juntos .pero teniamos en mente de conocer nuestras famlias y convivir y solo dejar que llegue El momento solo que ,mis padres no an estado de acuerdo con lo nuestro .nosotros emos echo Todo por estar bien y que nos acpten pero no lo permiten y solo quieren seprarnos El me trata muy Bien somos casi de la misma edad ,nosotross solo queremos conocrnos mas antes de jurtarnos . solo que mis padres me corren de la casa . y pues me hasen sentir mientras o solo quiero un noviazgo bien .
algun consejo que ,me den acepto su opinion